4/19/2010

CADENA PERPETUA Y CARCEL COMUN

Sentencia en el primer juicio a represores en Rosario
Condenaron a cinco imputados por violaciones a los derechos humanos en la ciudad


El pasado jueves 16, el Tribunal Oral Federal 1 de Rosario, dio a conocer la sentencia para los tres ex jefes militares y dos ex agentes civiles de inteligencia, acusados de cometer delitos de lesa humanidad durante la última dictadura militar en nuestro país.
El juicio que corresponde a la causa Guerrieri- Amelong, se inició el 31 de agosto del año anterior y recién después de varios y largos meses, finalmente se dictó la sentencia, donde los ex militares Pascual Guerrieri, Juan Amelong y Jorge Fariña y los agentes civiles de inteligencia militar Walter Pagano y Eduardo Constanzo acusados de cometer delitos de torturas, amenazas, desaparición y privación ilegítima de la libertad ejecutados en los centros clandestinos conocidos como la Quinta de Funes, La Calamita, Escuela Magnasco, La Intermedia y la Fábrica Militar Domingo Matheu recibieron la condena de cadena perpetua en cárcel común.
Si bien la mayoría de los represores tienen que cumplir la condena en cárceles comunes, se analizará el caso de Guerrieri y Constanzo, por temas de salud, lo cual correspondería, dependiendo de los análisis, prisión domiciliaria.
Una gran concurrencia de movimientos estudiantiles y políticos, además de algunas madres de Plaza de Mayo, se congregaron frente al Palacio Judicial, donde festejaron la sentencia dictada con cánticos, aplausos y abrazos, colmados todos de una gran emoción y euforia .
Una de las Madres de Plaza de Mayo de Rosario, recalcó, frente a la gran multitud que se convocó en Oroño y Rioja, que el fin de este juicio es sólo el comienzo de una larga lucha de condenar a todos los culpable, “una lucha que viene desde hace más de 30 años”. Otra de las madres, destacó el compromiso de los jóvenes de hoy por mantener el espíritu del ideal, que sus hijos tuvieron durante la dictadura y que fueron duramente torturados y privados de su libertad por sus pensamientos.
También se pidió por el esclarecimiento de la muerte de la testigo Silvia Suppo, asesinada en su comercio en la localidad de Rafaela; testigo crucial en el juicio de 2009 que condenó por primera vez a un juez federal, Víctor Brusa (junto a un grupo de tareas) por delitos de lesa humanidad.
De ahora en más, comienza una larga lucha para que “todos” los políticos y militares partícipes de la última dictadura de nuestro país sean sentenciados legalmente, porque el pueblo ya los condenó

Fuentes: www.rosario3.com, diario La Capital, testimonios grabados durante la marcha.


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